4 Hombres, 4 lecciones, 4 tesoros.
Comienza abril, mes 4, nace contar lo que recibí de 4 hombres. Los 4 muy diferentes entre si en cuanto a como eran, como vivían y la confluencia que tuvieron conmigo. Alguno estuvo presente en mi vida por largo tiempo pero con otros apenas hubo contacto, nos vimos una vez, dos veces….Todos ellos han fallecido y cuando pienso en ellos, cuando mi corazón mira en su dirección me pasa con los 4 lo mismo, siento Amor, Gratitud, los siento conectados (aunque no se conocieron entre ellos) pero lo que más siento es VIDA, siento algo VIVO que sigue llegando a mi.
Primera lección:
“Has de dar la espalda a lo que fue y ya no es para tomar tu Camino”
No perder los ojos en lo que nos acompañó nos salva del dolor, nos deja tomar el Camino propio y llega así un alivio que no es posible si paramos nuestro paso, si nos quedamos mirando atrás. Como el marinero que se adentra en el Mar y ha de mirarlo sintiendo que la Tierra queda a su espalda….siendo así está bien, el mismo Mar que mira y le abre paso, en su inmensidad, alcanza la Tierra y sigue uniendo al marinero con Ella.
Segunda lección:
“No des importancia a las cosas, las cosas no tienen importancia”
Cuando las personas le dan importancia a las cosas se esfuerzan por ellas, sufren, trabajan pero no obtienen lo que parecía se iba a lograr. Se consigue un cuerpo cansado, enfermo, que en ese cansancio descubre lo importante, lo que queda después del río de cosas…Alma.
Tercera lección:
“La rigidez está en la mente…y nunca es tarde para cambiar”
Porque la mente caerá, antes o después lo hará. Muchas veces decimos que cambiar no es fácil pero quizá es mucho más difícil vivir la dureza de las experiencias que llegan cuando no cambiamos.
Cuarta lección:
“No sabemos qué nos hace bien”
Buenas vidas pueden esconder mucho dolor, vidas en apariencia penosas, duras, pueden cobijar a un Alma libre, que vuela alto con facilidad….no sabemos, no sabemos de nosotros, no sabemos de los demás. Respetar.
4 tesoros que resuenan en mi, vivos, que agradezco y suelto al viento…..tesoros simples, como lo fueron nuestros encuentros, tesoros infinitos, como infinitos somos todos.
Gracias infinitas por expresarte, por compartirlo, por ser y estar. Así es, somos vida y somos muerte y en como lo sentimos y como lo integramos está la razón de este caminar haciendo camino…
Un abrazo Jordi, gracias mutuas y ¡seguimos!!